13 octubre 2005

Julio Valdeón Blanco

Dedico estas breves a un obrero del blog, Spleen de Nueva York, con el que comparto sangre. Se llama Julio Valdeón Blanco y le da al ladrillo tipográfico desde Nueva York. El erial que ya sufrieron otros lo lleva a América con la intención de ponerle al mundo folios que merezcan la pena. Nos envía latigazos de su genio, sinceros y restallantes, en su diario electrónico. Ya disponible, a diario, en su ordenador.
Además, es un veterano novelista joven (Los fuegos rojos, El fulgor y los cuerpos) que escribe como quien no quiere la cosa, pero que te deja con los nudillos en blanco de tanto apretar las hojas mientras lo lees. Tengo la suerte de haber paladeado Princesa antes que nadie, novelón inédito que en galeradas nos trae un mundo de pasiones, crímenes, intrigas, fracasos, costurones de sangre, traiciones que trascienden el Estrecho de Gibraltar y personas y personajes más grandes que la vida, más pequeños que el mundo que tan bien retrata Julio. Estén atentos a su publicación.
Me espera la nueva Balada de la mala reputación, que ya conocí en tallo verde hace unos meses, recorrido fiero por el camino de quien quiere ganarse la vida escribiendo.
No se lo pierdan.