20 julio 2009

Un hombre intachable (2.002)


Mi profesión está estrechamente relacionada con los productos lácteos. Lo que pienso, es la leche. Lo que hago, apesta como el queso. Pero, al final, lograré acceder a la nata. Casi siempre es muy sencillo. El hombre mata a golpes a la mujer. La mujer mata a cuchilladas al marido. Ves el cadáver y unos minutos después ya sabes quién ha sido. También están los superlistos que quieren firmar el crimen perfecto, pero siempre incurren en algún error. Los más complejos de todos son los asesinatos casuales, cuando el criminal sólo ha visto a la víctima en el momento del crimen.

Etiquetas: