09 julio 2007

Apocalypto (2.006)


Cine espectáculo. Puro y duro. El clan del protagonista es arrasado para alimentar la sed de sangre de una civilización, la maya, que se nos presenta decadente y prisionera de sus propios excesos. La barbarie es ejercida contra los pueblos del bosque por un entramado falso y brutal. Prueba de ello es el aspecto de los ¿ciudadanos? mayas, con su cuerpo pintarrajeado, perforado, tatuado y demás. Frente a ellos, un pueblo del bosque, que no conoce el miedo, y que vive en armonía aparente con la naturaleza.
Apocalypto entendido como revelación, como principio. Una civilización en decadencia y Garra de Jaguar que buscará un nuevo comienzo, desde la célula, con su compañera y descendencia.
Mel Gibson domina el lenguaje cinematográfico, como ya demostró en The man without a face y Braveheart (no opino sobre The Passion of the Christ porque no la he visto). Arropa la acción con un extraordinario vigor en la cámara, con nervio en las escenas de persecución, que son muchas. En la dirección de actores lo fía todo o casi todo a las miradas, guiando a sus personajes de manera magistral por la escena.
Y todo hablado en maya. Ciento treinta y dos minutos que se esfuman ante nuestros ojos. Qué más se puede pedir a una película.