20 mayo 2006

Otros blogs

Un amigo cibernético, en tiempos desconocido, Javier, me regala un blog. Aquí queda, Toro, torero y afición.
La navegación electrónica parte de la pasión por los toros, hace escala en De Purísima y oro, y fondea brevemente en este Espíritu de Pavese, mi casa.
El mundo es de los valientes, los que no temen a los viajes, los aguerridos exploradores de mundos paralelos y para listos, variados, entrañables, e incluso exigentes.
Don Blas de Lezo recorre incansable la galaxia Internet en busca de una explicación para lo que está pasando en este país, ya saben, España, nuestra patria. Aún tiene la esperanza de encontrar respuestas, mientras yo hace años que la perdí.