28 noviembre 2011

Noviembre


Escucho la lluvia.
Indagué entre la niebla. Pisé nubes, recorrí las calles, golpeé paredes.
Y ahora me enfrento a una pantalla blanca.
La vida es una escala de grises y nosotros nada más que brochazos.
En la calle las luces amarillas cuelgan del aire, las personas entran y salen del gris, los coches invitan a destellos rojos.
Hace un año, en una cocina, como siempre, reímos mientras esperábamos el momento de empezar a llorar.
Desde hace un año, sí, es cosa nuestra.

dedicado a tía F., J., M.E. y M.A.